LOS ORÍGENES:
Los orígenes del parisino se remontan al siglo XIX, pero es adecuado conocer que la segunda mutación del canario ancestral aparece en Flandes hacia el 1700, con la aparición de un canario ligeramente más grande; como cosa interesante y novedosa, el pecho cubierto de plumas rizadas. Este canario es conocido como “Serin Hollandais” o Canario Holandés (3) y lo podemos considerar como el ancestro de todos los canarios rizados.
El primer dato documentado sobre este canario aparece en el libro de Hervieux de Chanteloup de 1766 y son introducidos en Francia (4) hacia 1740, como consecuencia de la visita que realizan a los Países Bajos la Duquesa de Berry y Hervieux de Chantelaup (5) gran especialista en la cría de canarios y escritor de libros de canaricultura.
Esta especie de canarios, según JANNIN (1852, págs. 10-11) es el resultado de la atención asidua de los aficionados, en la selección de los pájaros para unirlos en parejas. El origen proviene del canario ordinario, por las aportaciones de los más bellos y los más grandes, los cuales eran acoplados constantemente (6).
Estos canarios son traídos a Francia -hace aproximadamente cincuenta años- procedentes de Holanda y Bélgica, donde aparecen los primeros criaderos.
El serín holandés es notable por su cuello largo terminando en una cabeza fina, dócil, cuerpo arqueado por el desarrollo de su cola y la altura de sus patas. Difiere del canario ordinario por su talla, como en todas sus dimensiones.
Existían dos tipos de serín holandés; el primero llamado “double” (doble), el cual las plumas del estómago son muy abundantes (más…)